"No
sé qué vamos a hacer con nuestro hijo,
cada vez se porta peor. Ha suspendido 6 asignaturas,
su tutora me ha dicho que se porta fatal en clase,
y en casa, las cosas van de mal en peor. No estudia,
no nos ayuda en nada. Nuestra relación con
él está muy deteriorada, no nos cuenta
nada, sólo habla por el Messenger y por el
móvil con sus amigos. Cuando intentamos acercarnos
a él nos contesta fatal. Ya no sabemos qué
hacer".
Seguro que en alguna ocasión has escuchado
a algunos padres verbalizar quejas de este tipo acerca
de su hijo o es posible que hayas sido tú en
alguna ocasión quien las haya formulado. Oyendo
esta descripción, probablemente nos imaginamos
a un chico irresponsable, mal estudiante, irrespetuoso
con sus padres, y un sinfín de adjetivos nada
deseables.
Ante estos problemas, nuestra respuesta normal como
padres es preocuparnos por lo que está sucediendo,
e intentar buscar soluciones. Pero quizás,
estamos dejando de lado una herramienta de gran utilidad
para mejorar este tipo de problemática, ya
sea por desconocimiento de la misma o por la costumbre
de utilizar otros métodos.
Probablemente, estamos atendiendo más a la
parte negativa de la conducta de nuestro hijo, dando
por supuesto que las características positivas
que posee las presenta cualquier chico de su edad,
restándole valor a éstas.
Nosotros, desde "orientados" te vamos a
proponer que utilices las virtudes o fortalezas de
tu hijo para que mejore vuestra relación, y
así hacer frente a la problemática específica
que estéis atravesando.
Para ayudarte a valorar la relación que mantienes
con tu hijo y el estilo de educación que sueles
utilizar con é, hemos elaborado dos cuestionarios.
El cuestionario de puntos fuertes de tu hijo, te ayudará
a conocer su carácter y te servirá para
mejorar su comportamiento. Seguramente tienes muy
presente las conductas negativas de tu hijo y lo que
crees que debería cambiar, pero si no sabes
lo que tu hijo hace mejor, te falta la mitad de la
información que deberías conocer.
¿Cómo te ayudará eso a modificar
su comportamiento? Bueno, recuerda que los seres humanos
funcionamos mejor cuando estamos contentos, cuando
somos optimistas y creemos que, si nos esforzamos,
nuestros asuntos mejorarán. Pero para que esto
ocurra es necesario que estemos motivados, y lo que
nos motiva es lo positivo, no lo negativo.
El cuestionario de estilos educativos te ayudará
a reflexionar sobre el tipo de relación que
has establecido con tu hijo, y qué cosas consideras
prioritarias en su educación. Es frecuente
que los padres pensemos que el problema es de nuestro
hijo y que sólo a él incumbe el cambio,
pero los profesionales insisten en que para que nuestros
hijos cambien, nosotros mismos debemos estar dispuestos
a cambiar. Si eres constante, después de un
tiempo prudencial, empezarás a notar que tu
hijo también se comporta de otra manera.
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